Quemar después de leer

Al hilo de esto de la confianza y la gestión de la información, es muy recomendable la última película de los Coen (Quemar después de leer). Un retrato feroz de las pulsiones que mueve la sociedad actual: nadie confía en nadie, todos mienten y sólo se salva el único personaje capaz de desear algo con tanta fuerza como para luchar por ello hasta el final: desea cuatro operaciones de cirujía estética y las consigue. En medio de todo ello la CIA se convierte en un esperpento incapaz de explicar, intervenir o controlar las miles de micro- conspiraciones domésticas que se multiplican hasta desestabilizar el orden planetario. Mucho más que la proliferación de las armas de destrucción masiva, la expansión incontrolada de las operaciones de pechos sin límite de edad o de estrato social y, sobre todo, la pulsión de masas de ciudadanos en todo el planeta que desean esculpir sus cuerpo utilizando los modelos estéticos de las pantallas digitales acabará por volver locos tarde o temprano a los analitas de la Casa Blanca. Si no al tiempo.