Televisiones, violencia de género y regulación

Hoy se reúne la vicepresidenta del Gobierno de España con las Unión de televisiones Comerciales Asociadas (UTECA) con la intención de pedirles responsabilidad en el tratamiento de la violencia de género. Se trata de un gesto que no parece venir soportado por ninguna medida. Un gesto que pretende detener la dinámica de espectacularización de la violencia de género en la que han entrado las cadenas de televisión, no sólo en los programas de entretenimiento (estilo Diario de Patricia) sino también en los informativos. La sangre, las víctimas dentro de un saco de plástico, las víctimas a merced de sus agresores, los familiares de las víctimas descompuestos.... esas son las imagenes que muestran y persiguen las televisiones... Eso no es visibilizar la violencia de género, eso no es ayudar a que las mujeres denuncien... Desde mi punto de vista eso es convertir la violencia en un espectáculo. Ese tratamiento condena a las mujeres agredidas a asumir el rol de víctimas y hace de los maltratadores el centro de una tragedia, de una narración mediática (informativa o de entretenimiento) en lugar de en unos simples "parias" sociales. Frente a eso el Gobierno pide "responsabilidad" en lugar de ejecutar la creación de un organismo de regulación que, como en otros aspectos de la vida social, cultural y económica, regule y supervise aquellos aspectos esenciales convivencia. A nadie se le ocurre poner en cuestión el papel de la CNMV en la gestión de valores, por ejemplo, ¿Por qué ese afan por defender un esquema de "liberal" a ultranza de la cesión del espacio radioeléctrico (espacio público) a las cadenas de televisión? ¿Por qué el Estado español es uno de los pocos de la UE y posiblemente el único de los países importantes de la UE a 15 que no tiene un Consejo del Audiovisual? ¿De qué sirven gestos puntuales como el de hoy y acuerdos de autorregulación como el que se firmo hace dos años sobre las franjas horarias protegidas para los menores si no las cumple nadie? Mientras en la violencia de género, en algunos de sus aspectos como el tema mediático, se actúe de cara a al "galería" sin medidas claras y un modelo consistente de desarrollo del servicio público de los mass media es imposible conseguir "efectos". Mientras, desde mi punto de vista, y como ya ha comentado alguien, lo que las cadenas parecen entender por hacer visible la violencia de género en los informativos y en los programas de entretenimiento es muy posible (no hay todavía estudios fiables) que esté provocando el efecto contrario, es decir, un mayor victimismo de las mujeres y un efecto llamada en los maltratadores que perciben en su actitud un rol social reconocible y visible. En este sentido, un estudio reciente pone en paralelo la evolución de las agresiones a las mujeres con la aparición de noticias en la prensa (VIVES CASES, Carmen (2005). La violencia contra la mujer en el espacio discursivo público. Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia. Serie Documentos, nº 8.). Los gráficos estadísticos de este estudios generan cierto vértigo... la coincidencia de los momentos de mayor atención de los medios con los momentos de mayor número de muertes es difícil leerlo como una mera coincidencia. Se trata de un tema delicado, pero tremendamente interesante y sobre todo esencial para determinar cómo regular el papel de los medios. En estos momentos, da la sensación de que ni las cadenas de televisión tienen voluntad de reflexionar sobre ello ni el Gobierno parece tener un proyecto o un idea clara sobre las estrategias más adecuadas para el tratamiento de la violencia de género en los medios, fotografías y brindis al sol a parte.

Svetlana: televisión y violencia de género

Por descontado que el único culpable "directo" de la muerte de
una mujer en un caso de violencia de género es el asesino con
sentencia firme (no el sospechoso). Sin embargo, el caso de la
muerte de Svetlana tras su paso por el programa de Antena 3
Diario de Patricia pone de nuevo en jaque el papel que está
teniendo en la programación televisiva todo lo relacionado con
la "violencia de género".
Y, desde mi punto de vista, el tratamiento de las situaciones de
relación de género en TV de manera evidente (tratamiento
informativo de un hecho) o de manera sutil (una pareja que se pelea o
se reconcilia en directo) conlleva en más de una ocasión un
proceso de espectacularización de los hechos, de refuerzo de los roles
de los protagonistas y de escandalización de los espectadores más que un
intento de regular la relación de la sociedad con estos hechos. No
olvidemos que la televisión, en este país, es un servicio público. No
se trata de culpar a nadie, se trata de establecer las pautas de
regulación del tratamiento de la violencia de género y de la intimidad
en los mass media. Dicho eso, podemos discutir si la presencia por
sorpresa de una expareja en un plato puede o no influir en el desarrollo de hechos
posteriores. No creo que el hecho de que un programa de televisión
ponga en contacto a una persona con sentencia de 11 meses de cárcel y
orden de alejamiento ayude a evitar posteriores acontecimientos.
Tampoco creo que forzar que una joven diga que "no" a su pareja ante 2
millones de espectadores y que el programa propicie la visibilidad
social de miserias sentimentales, económicas y personales haya
ayudado a la asimilación por parte del interfecto de su situación. La
máquina de la televisión es un "monstruo" cuyas consecuencias son de
difícil predicción, sobre todo con 2 millones de espectadores en una
franja televisiva protegida para menores. También creo que este hecho
no es igual que el caso de Ana Orantes, aunque se trata de otra vuelta
de tuerca en el proceso de espectacularización del hecho de la violencia...
a Ana Orantes no la engañaron para ir al programa de televisión,
pero su caso ha servido para mostrar a muchos productores
que una situación como la de Ana vale su peso en oro y que ese
espectáculo es el que una parte de la audiencia está demandando. Lo de
Ana fue una situación que nadie esperaba... en el Diario de Patricia la
situación se busca cada tarde para montar el circo de los medios
basura.
Y por último... resulta lamentable que una sentencia de prisión y de
alejamiento del día 30 de octubre no pudiera ser firme y eficaz 15 días
después de haber sido dictada... Me parece que, dada la situación, 15
días son suficientes para que se tomen medidas que garanticen la
seguridad de las mujeres respecto de sus agresores, lo siento, pero lo
veo triste. Sé que ese no es mi tema y que no dispongo
de datos para justificar o refutar, pero esos quince días pudieron ser
la diferencia entre la vida y la muerte de una persona y es muy triste
que una mujer muera con una orden de alejamiento y con una pena de
prisión para su maltratador que no ha podido ser ejecutada. Creo que no
es el primer caso de mujeres muertas con órdenes de alejamiento
firmadas e incluso comunicadas... Ese mensaje, a través de los medios,
gestionado de manera irresponsable, puede ser demoledor para el proceso
de lucha contra la violencia... si una sentencia no sirve para salvar
la vida de las mujeres y un programa de televisión puede poner en el
plató a un maltratador ante su víctima, es que algo no va bien.
Un saludo y perdón por la extensión.

El negocio de los Blogs

Violencia de género y televisión: El diario de Patricia

Lo televisión, otra vez, centro de la polémica. El joven que supuestamente acuchilló a su novia en Alicante la semana pasada fue a televisión a pedirle otra oportunidad a su víctima. Ella, que tenía un hijo de dos años, había renunciado a las órdenes de protección ..El programa de Antena 3, "El diadio de Patricia" ha conseguido de nuevo convertir en un espectáculo la violencia de génera. El tratamiento informativo de las relaciones de pareja en los medios de comunicación de masas, en general, y en la televisión en particular, vuelve a desatar la polémica... ¿será por casualidad o será por sistema? ¿es el espectáculo mediático una consecuecia de los hechos o es una manera de "reconstruir la realidad"? El caso de Ana Orantes vuelve a aparecer como un "fantasma" que algunos buscan desperdamente que se manifieste en los talk-shows y en directo cada tarde:

Sobre este mismos asunto y sobre el papel de los medios de comunicación en la construcción informativa de las violencia de género, es recomendable escuchar las declaracines y opiniones de Monserrat Comas (Observatorio sobre la violencia de género del Consejo G. del Poder Judicial) y Victoria Camps (Consell de l'Audiovisual de Catalunya) en el programa La Ventana de la Cadena Ser (21/11/07) ...

Reflexión fundacional

El planeta es un jardín visto por los ojos clarividentes de El Bosco. Los seres humanos se mueven entre mostruosidad y paraíso en una densa y empalagosa confusión en la que todos y todas tratamos de respirar día a día... Se hace difícil la comunicación, quizá porque los ángeles, los demonios y los seres humanos hablamos lenguajes diferentes... o quizá porque hablamos el mismo.

De la web "hipodérmica" a la web participativa

La difusión del fenómeno de la Web 2.0 o web participativa ha supueso un avance más en la realización de la gran esperanza de Internet: el proceso comunicativo bidireccional y participativo en el que receptores y emisores intercambian sus papeles hasta confundir los roles. El "poder" en el proceso comunicativo parece repartirse en experiencias como Wikipedia, YouTube, MySpace, etc. A este respecto Ismael Nafría ha publicado "Web 2.0. El ususario, en nuevo rey de Internet" (Madrid: Ediciones Gestión 2000). También en esta línea: CREMADES, Javier (2007). Micropoder: la fuerza del ciudadano en la era digital. Madrid: Espasa-Calpe.

Lomografia: revelarse para rebelarse

La lomografía es una tendencia fotográfica, casi una filosofía, que enfatiza en la fotografía casual y espontánea. Las lomografías se caracterizan por tener gran distorsión en los bordes, mientras mantienen el centro intacto, y son capturadas por cámaras especiales de 35mm. El nombre de esta práctica fotográfica se la debemos a una de las mini-cámaras analógicas que más se usan en esta práctica: las LOMO KOMPAKT AUTOMAT. Se pueden adquirir en la tienda Urban Zoo de Valencia. La lomografía es una forma de rebelarse contra la "mirada digital", pretende encarnar de nuevo el acto de la reproducción fotográfica, dándole espontaneidad, pero también materializando de nuevo el proceso de reproducción de la realidad captando la luz en una cámara oscura: la lomografía es una forma de volver a "revelarse".

Pintar el proceso de comunicación

Pintar el proceso de comunicación que vivimos día a día... reflejar en signos digitales los momentos en los que entramos en contacto y trasladamos o procesamos mensajes. No es gran cosa, pero puede ser suficiente para distanciarse o acercase a nuestra realidad... somos consumidores más que ciudadanos y lo que más consumimos son mensajes. Somo los mensajes que consumimos y la cantidad de mensajes que para la industria de la cultura somos capaces de consumir.

Adolescentes virtuales

Se estima que el 61% de los adolescentes del Reino Unido de entre 13 y 17 años tienen un perfil personal en un sitio de redes que les permite socializar on line.

El planeta es un jardín visto por los ojos clarividentes de El Bosco. Los seres humanos se mueven entre mostruosidad y paraíso en una densa y empalagosa confusión en la que todos y todas tratamos de respirar día a día... Se hace difícil la comunicación, quizá porque los ángeles, los demonios y los seres humanos hablamos lenguajes diferentes.